16 de septiembre 2013
Manuel Ek
Difícil semana del gobernador de Quintana roo. El policía no agredió a los maestros con gases, gracias a la intervención de Luis Germán; pero no había nadie al lado de su chófer para decirle que no se deben atropellar maestros.
Quizás se le esté atragantando el mundo de caramelo. Lydia Cacho no es de mi agrado, me parece una oportunista, pero gracias a chayoteros profesionales «desencantados» vamos conociendo para de la verdad.
Si no modifica sus actitudes, y trata de gobernar de verdad Beto acabará mucho peor de los que imaginamos, lo que ya es decir.
Parece que los quintanarroenses empiezan a superar el límite de tolerancia y eso que arrasó en el proceso electoral después del lamentable papel que hicieron todos los demás partidos, y políticos que se dejaron comprar de forma deshonrosa.
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