Homicidios en Quintana Roo: Un verdad a medias. La reforma del sistema de Seguridad Pública.

17 de abril 2016

Existen dos grandes fuentes de información sobre los homicidios que ocurren en la República. El Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP); y el Anuario Estadístico y Geográfico del INEGI. El ya famoso «Semaforo Delictivo» coordinado por una entidad de la sociedad civil toma su información del SESNSP, que a su vez recaba su información de las procuradurias estatales.

Hace un par de años estaba trabajando en un artículo y se me encendió una alarma al darme cuenta que el INEGI para el año 2010 y 2011 señalaba que habían sido registradas 665 y 661 denuncias de Homicidio en el Ministerio Público. Eso contrastaba de forma dramática (también en otros 11 estados de la República), con los cadaveres encontrados, que eran 145 y 163 respectivamente. ¿Por qué la gente denunciaba más que los cadaveres encontrados?. Al escribir esta columna he vuelto a buscar información y resulta que en el año 2012 (que es el último sobre el que el INEGI da información)… las denuncias se reducieron drásticamente a 54, mientras los cadáveres reconocidos se mantenían en una constante de 154.

Los datos del SESNSP y el INEGI no suelen coincidir, y hay un gran polémica en el país sobre este punto.

Sin embargo me ha tomado la tarea de comparar las dos informaciones en el cuadro que encuentran adjunto, y de profundizar por municipio, desde el año 2005 al 2015, en Othón P. Blanco, Solidaridad y Benito Juárez en los datos del INEGI.

¿Alguien puede creer que haya más homicidios en Chetumal, que en Playa del Carmen? ¿Alguien puede creer, sinceramente, que el número de homicidios sea tan reducido en el estado? Es una cuestión de sentido común. Un sencillo recuento de los homicidios publicados en prensa mostraría datos muy diferentes.

Especialmente si recordamos los datos de denuncias frente al MP del año 2010 y 2011 y su radical reducción en el 2012 (en el momento de más violencia en México); la desconfianza se evidencia de una forma determinante.

La procuraduría de justicia del estado de Quintana Roo ha estado facilitando información dudosa a las autoridades del Estado; por la razón que sea, pero ésto debe ser arreglado y debemos contarle al mundo nuestra verdad para poderla enfrentar de forma correcta.

En otro orden de cosas, no puedo dejar de reaccionar frente a un promesa de campaña en mi opinión errónea de CJ, no hacerlo sería un error por mi parte (y una deslealtad).

Quintana Roo ha invertido desde el año 2008 al 2015, 7 mil 972 millones de pesos en Seguridad Pública y Procuración de Justicia. Además la federación, con la coparticipación de Estado y Municipio ha invertido a través de Fondos y Subsidios de Seguridad Pública otros 3,392 millones de pesos.

¿Dónde se ha ido este dinero? ¿Ha mejorado nuestra seguridad después de esta inversión tan importante?: mi respuesta es que no.

La mayoría de estos recursos se han ido en programas de adquisición de parque automotriz, y de medidas como las que le están sugiriendo al contador que defienda (además de a los bolsillos de determinados funcionarios).

El gran reto, además de decir la verdad sobre nuestra situación, es crear cuerpos policiales competentes. Depurar las instituciones de seguridad, profesionalizar y capacitar…crear carreras profesionales en las que los policías se sientan orgullosos de sus condiciones laborales y la sociedad se sienta tranquila. Se han de crear las famosas unidades acreditadas de Policía estatal, policial ministerial y custodios penitenciarios. Se han de fortalecer las policías municipales que puedan ser autsostenibles y desaparecer en un mando único que cuente con esas unidades acreditadas el resto de corporaciones.

El asunto de la seguridad es muy serio y debemos enfrentarlo con profesionalidad y cambiando la dinámica que ha presidido la gestión del sector en nuestro estado. Nuestra economía, nuestro bienestar y tranquilidad depende de ello. Espero que los «apasionados» por el proyecto que encabeza el contador no se molesten con la crítica, pero el servicio a un proyecto requiere que se levanten las alertas, cuando el error se presenta. Yo me cansé de sonreir a lo pendejo, eso le ha costado mucho a Quintana Roo.

Add Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *