17 de julio 2016
Como si de repente todo el mundo se hubiera puesto de acuerdo, nada parece estar pasando en el estado. Hace un calor tan tremendo que parece sacrilegio tratar de trabajar, escribir o leer.
A pesar de ello los del Comité Ciudadano De Quintana Roo han seguido recogiendo firmas para que la federación asuma los poderes en el estado.
Ya nos contarán cuantas firmas lograron juntar, pero su gesto es un esfuerzo loable. Están señalando lo evidente. No hay gobierno en el estado.
No falta tanto para el cambio de gobierno, quizás por ello la gente se lo está tomando con calma.
Beto perdió la elección, le batearon la posibilidad del blindaje, se proclamó que no hay contacto entre el gobierno saliente y el entrante y aquí paz y después gloria.
Sin embargo, a pesar de esta tregua no dejan de pasar cosas graves y por mas declaraciones que se hagan, no se percibe respuesta por parte del estado. Serios problemas de inseguridad han aturdido el estado en la última semana y sin embargo pareciera que la canícula todo lo absorbiera.
Los dolientes que abandonan el gobierno guardan silencio con temor; los que ganaron las elecciones esperan prudentes.
Sin duda hay corrientes bajo la superficie, pero todo el mundo está esperando a que baje tantito el sol para romper la tregua y manifestarse.
En el fondo creo que unos y otros recuerdan el video que se filtró en el que el gobernador electo hace unos años mostró su carácter y prefieren esperar pacientemente a que inicie oficialmente la acción.
A mi me gustaría que ese carácter se utilizara para planear un estado más incluyente. Una sociedad menos temerosa de expresarse. Una comunidad que pudiera conducirse con reglas democráticas convencionales.
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